El dolor cervical, tiene una alta prevalencia en la sociedad. Los datos epidemiológicos sugieren que existe una prevalencia de un 10-20% en la población mundial.
Sabemos que el deporte, el desarrollo laboral y las actividades de la vida diaria, exponen el aparato locomotor a lesiones traumáticas muy diversas y variables, que inevitablemente acaban por afectar los tejidos blandos a nivel musculoesquelético tanto de forma directa como indirecta.
El complejo cervical está formado por siete vértebras cervicales además del occipital y la cara superior de primera dorsal como superficie articular. Posee una fisiología y biomecánica compleja que da respuesta a las demandas funcionales como el mantenimiento de la horizontalidad de la mirada, así como su gran capacidad de adaptación a las disfunciones.
¿Sabías que el complejo cervical es el que consta de mayor movimiento para el posicionamiento correcto de la cabeza? La flexión consta de 50º de movimiento, la extensión de 60º, y las rotaciones tanto derecha como izquierda de unos 85º aproximadamente.
La cervicalgia se trata del dolor localizado a nivel cervical, con sintomatología asociada o no a las extremidades superiores (braquialgia). La sintomatología cervical puede recorrer desde occipital hasta raquis dorsal y extremidades superiores. La gran mayoría de la sintomatología cervical está asociada a degeneración de tejidos blandos como estructuras osteocartilaginosas, discales, ligamentosas y musculares.
Las cervicalgias pueden clasificarse en agudas o de larga evolución. La manifestación más frecuente que encontramos en la musculatura cervical son las contracturas y los nódulos hiperirritables o hipersensibles que pueden reflejar o no dolor referido a otras estructuras.
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¿Sabías que algunas de las consecuencias derivadas del bruxismo pueden ser el dolor y desplazamiento discal anterior en la articulación temporomandibular?
El bruxismo se define como una actividad parafuncional diurna o nocturna que incluye apretamiento y rechine de los dientes de manera inconsciente por la actividad repetitiva de la musculatura mandibular, que puede producir abrasión de los dientes y cuyo origen ha sido tradicionalmente atribuido a anomalías oclusales entre otros factores.
El bruxismo se subdivide en consciente (bruxismo diurno o en vigilia), que se asocia con estímulos externos psicosociales, ambientales y pérdida del control motor; e inconsciente (bruxismo nocturno o del sueño).
De manera característica pero no exclusiva, el bruxismo diurno se identifica por el apretamiento, mientras que el nocturno, con rechinamiento. De acuerdo con la modalidad de apretamiento o rechinamiento, se pueden provocar daños con distintas manifestaciones clínicas.
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El dolor de cuello es uno de los trastornos musculoesqueléticos más frecuentes y supone un problema significativo en los cuidados de salud.
El dolor de cuello presenta una prevalencia alta en triatletas, ciclistas y especialmente en atletas recreacionales. El ejercicio terapéutico suele ser una intervención bastante efectiva, tanto a corto como medio plazo en estos problemas.
Dentro del ejercicio terapéutico, destaca aquel cuyo enfoque está en el control motor. Varias investigaciones han evidenciado la existencia de alteraciones en el patrón de movimiento de la columna cervical de pacientes con dolor de cuello como, por ejemplo, menor capacidad flectora, disminución del rango de movimiento y/o una baja precisión en el mantenimiento de la máxima contracción isométrica voluntaria.
Pero ¿qué es el control motor?
El control motor es la capacidad del sistema nervioso central en producir movimientos útiles, coordenados e integrados con el cuerpo y ambiente.
El control motor y ejercicio terapéutico son sin duda algo indispensable para la mejoría del estado de los pacientes con dolor de cuello. De hecho, existen evidencias que el ejercicio terapéutico mejora el control motor y reduce el dolor y discapacidad de estos pacientes.
Las alteraciones en el control motor que suelen causar dolor o discapacidad requieren que el Fisioterapeuta intervenga en los componentes del aprendizaje motor, con el objetivo de potenciar un aprendizaje motor satisfactorio y también la capacidad de retención. Esta intervención requiere obviamente un entrenamiento repetitivo.
El trabajo de control motor y ejercicio terapéutico para el cuello se desarrolla dentro de un programa de reaprendizaje motor, que enfatiza la coordinación y la contracción de algunos músculos específicos del cuello, responsables de la flexión, extensión y los músculos de la cintura escapular.
La imaginería motora, es la representación mental del movimiento, en ausencia de movimiento corporal real, puede también ser empleada en la mejoría de la ejecución motora y en el aprendizaje de tareas motoras.
¿Como funciona la imaginería motora?
A través de la activación de diferentes áreas corticales, la imaginería motora es una herramienta muy útil en la hora de influir sobre el sistema nervioso central y promover la plasticidad neuronal.
Las estrategias terapéuticas basadas en la imaginería motora han demostrado mejorar la función sensorio motora cérvico-cefálica y también algunos aspectos motores, tal como el aprendizaje motor, el control neuromotor y la adquisición de competencias motoras.
¿Y cuánto puede beneficiar a los pacientes con trastorno temporomandibular? Podría la imaginería motora puede tener beneficios en su tratamiento? Puedes encontrar la respuesta a estas cuestiones AQUÍ.
El Trastorno Temporomandibular reúne un conjunto de condiciones que afectan la articulación temporomandibular y sus respectivas estructuras. Su síntoma más común es el dolor orofacial, que afecta mayoritariamente los músculos masticatorios y la propia articulación temporomandibular.
Otro de los síntomas asociados al Trastorno Temporomandibular es la limitación de la apertura de la boca y la incapacidad que genera el dolor. Cerca del 15% de los pacientes con una presentación aguda, se convierten en una patología de larga evolución.
La Fisioterapia desempeña un papel fundamental en el tratamiento de este trastorno, a través del ejercicio terapéutico. Sin embargo, algunos pacientes presentan limitaciones en la movilidad de la articulación temporomandibular, un rango de movimiento limitado e incluso miedo a realizar algún movimiento. Esta inmovilidad se traduce en un incremento persistente del dolor.
¿Cuál es el papel da la imaginería motora en estos casos?
La rotación mental es una de las herramientas utilizadas en la imaginería motora, donde se presentan al paciente imágenes de las partes del cuerpo humano en rotación y él tiene que identificar si la imagen se refiere al lado derecho o izquierdo.
Los pacientes con trastorno temporomandibular muestran una dificultad importante para reconocer la lateralidad del cuerpo, es decir, necesitan más tiempo para reconocer el lado derecho e izquierdo de su propio cuerpo o en representaciones de otras personas.
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Una de las áreas de actuación de los fisioterapeutas es las disfunciones de las articulaciones temporomandibulares (ATM). Estas disfunciones se caracterizan mayoritariamente por la presencia de dolor en la región facial y preauricular, limitación en los movimientos mandibulares y ruidos durante la realización de movimientos.
¿Sabes cómo es mantenida la posición mandibular?
La posición mandibular es mantenida gracias a los reflejos mandibulares y a la fuerza de la gravedad. Esta posición depende también de la posición ortostática de la persona y de las variaciones necesarias para permitir el funcionamiento de estas articulaciones.
Durante los momentos de vigilia, la posición fisiológica (posición vertical de la cabeza) se caracteriza por la posición de inoclusión fisiológica (PIF): la mandíbula se sitúa de forma que los dientes no estén en contacto y se mantengan separados, mientras los labios se encuentran cerrados, sin hacer fuerza.
La PIF se mantiene gracias a un equilibrio cefálico y de la musculatura responsable por la apertura y cierre de la boca. Al aumentarnos el tono de la musculatura de cierre mandibular los dientes entran en contacto y a esta posición se la llama posición máxima interscuspidación (PIM).
¿Sabías que la PIM es utilizada como referencia para la valoración de los movimientos de la ATM?
Puedes evaluar la apertura, cierre, protrusión, retrusión, y laterotrusiones izquierda y derecha.